lunes, 9 de agosto de 2010

Cruzadas 2.0

Hace unos meses ya comenté que La Caixa enloqueció con una serie de medidas de seguridad para combatir la mortífera Gripe A (¿recordáis las alarmas a nivel mundial? ¿cuántas vacunas se compraron en este país, que ahora estarán en algún almacén?). También dí mi opinión sobre lo mucho que me molesta que el dinero que tenemos en los bancos esté en un limbo (=invertido en Bolsa). Pues bien, ahí va una nueva historia.

Hoy no hablaré de cosas tan genéricas y globales como las anteriores, sino que os contaré lo que me pasó el sábado por la noche, pensando que sería una noche de lo más agradable y divertida. Fui a sacar dinero con mi asquerosa tarjetita de débito de La Caixa en un cajero de BBVA, a sabiendas de que, a pesar de ser Servired, me cobran comisión (qué chachi!), y va el cajero y se la traga: pantallazo y se queda como si todavía se tuviera que introducir la tarjeta. Tres llamadas a un apestoso 902 de Servired para ver si podían reiniciar el cajero de los cojones, y nada. Llamada a otro 902 de La Caixa-Visa para anular la tarjeta, y me dicen que cuando solicite una nueva me piensan cobrar, "a no ser que tenga buen trato con su oficina". Pero bueno!!!! Mecagoentó!! Qué narices os habéis creído? Qué maldito servilismo estamos obligados a tener con Sus Santidades los bancos! Odio los bancos! Mucho! Viva la caja de zapatos debajo del colchón!
Bien, bien... Ya me desahogué un poco... Esta mañana he hablado con mi maldito banco y me han dicho, con mucha condescendencia, que no me cobraría, que se ponen en la piel de la persona y que no les parecería moral cobrar de nuevo (y eso que el trato que tengo con ellos no es precisamente bueno, siempre que voy es para quejarme). Son más buenos que Ghandi y la Madre Teresa juntos...

¿Y por qué he titulado este post como Cruzadas 2.0? Pues porque me quiero cambiar de entidad bancaria. No! Mejor aún: no quiero tener ninguna cuenta en ningún banco! Así, amigos míos, quiero animaros a vosotros a rebelaros. No más comisiones a diestro y siniestro, basta ya de cobrarnos por una miserable tarjeta de débito, que estáis ahí porque nosotros, los pringaos, os metemos el dinerito en vuestro infecto banco para que juguéis a la Bolsa. Vayamos todos como hordas de Uruk-hai mutados en Templarios y saquemos todos el dinero de golpe, a ver si lo tienen en cash en las oficinas (no, no lo tienen, pasaría como con Lehman Bros., acabará petando el sistema un poco más). La nómina, en un sobre, las facturas las pagamos en efectivo en correos, los que tenéis la suerte o desdicha de estar hipotecados no lo tenéis fácil, pero pagad con un ingreso en la oficina, al igual que los alquileres. Abajo con el capitalismo financiero! Y ya de paso, volvamos al sistema de trueque, que así nadie se enriquece con nuestro trabajo.

Teeengo huevos frescos de corral!! Pollos camperos a buen precio!!!!

4 comentarios:

  1. Jo, tú si que eres un valiente, querer pasar de bancos. Si luego no queda más remedio, que hay que domiciliar todo y si no lo haces no puedes contratar servicios básicos :(

    Te apoyo en tu cruzada y si lo consigues serás mi héroe (bueno, sólo con intentarlo lo serías)

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  2. El dinero esta mejor debajo del colchon di que si! Lo de tragarse las tarjetas cada vez pasa mas en todas las entidades. Sera para que no saquemos demasiado dinero demasiada gente?

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  3. Lo mismo que tú opinaba mi abuelo y era un tipo inteligente. Pero me temo que hoy en día no nos podemos dar el lujo de pasar de bancos. ¡Nos tienen atrapados!

    En fin, si tienes pensado algún plan, cuéntanoslo que te seguiremos. Un saludo.

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  4. Gracias a todos por vuestros comentarios. Me reconforta ver que no soy la única persona que se siente atrapada. Por mi parte, como vivo de alquiler y no tengo ningún préstamo ni crédito concedido ni necesidad de ello, lo haré todo "manualmente". Puede que nunca posea una casa, un coche de 20.000 o pida un crédito para pagar un crucero, pero al menos no me tendrán enganchad@. Ahora tengo que pensar en cómo desengancharme de Hacienda... y ya seré libre como un pajarillo, ja!

    Saludos

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